Estamos seguros de que en Pixar han existido cientos de historias hilarantes pero pocas o ninguna como la que ocurrió en 1998. Ese año la compañía estuvo a punto de perder Toy Story 2. La culpa la tuvo el borrado accidental del 90% de la película, aunque quizás es aún más rocambolesco la manera en que fue recuperada.
Y no es nada raro, más bien es algo que ocurre diariamente, quizá no al nivel de perder una producción de este tamaño, pero desde que los ordenadores se han convertido en el principal lugar de trabajo para el mundo entero, las historias de horror ante la pérdida de datos y trabajos es algo común. Un “delete” sin querer, un líquido que se derrama, un corte de electricidad en casa… cualquiera de estas situaciones es posible que haya acabado con el trabajo anterior. Y sí, ese es el momento en el que nos preguntamos la razón de no haber grabado anteriormente. La maldita de copia de seguridad que aparece en tu mente cuando no hay solución.
Así fue como Pixar rescató Toy Story 2 tras eliminarla y no tener copias de seguridad
Volviendo a los acontecimientos de Pixar, la historia se remonta a 1998, momento en el que los estudios estaban trabajando duro, la mayoría preparando el estreno de A Bug´s Life con la llegada del otoño, mientras que el resto llevaba alrededor de 10 meses en la producción de Toy Story 2, preparada para estrenarse en noviembre de 1999.
Uno de esos días Oren Jacob, director técnico asociado de Toy Story 2, estaba en la oficina con parte del equipo buscando un directorio de una escena donde aparecía Woody. Tras una actualización, se dieron cuenta de que muchos de los valores del personaje comenzaron a desvanecerse. Lo que ocurría es que donde Woody debía llevar un sombrero, ya no lo tenía, lo mismo en otra secuencia con sus botas, luego fue su cuerpo. Lo mismo empezó a ocurrir con otros personajes, todos estaban desapareciendo de pantalla.
Pixar trabajaba guardando todos los archivos en un único servidor central con Unix. Lo que ocurrió es que un miembro del equipo había ejecutado el comando rm –rf, el comando que se utiliza para eliminar archivos de directorios en Linux o Unix. En este caso además se había realizado desde el root principal de todos los directorios en el sistema compartido. Y aunque hoy podría resultar extraño que en una compañía como Pixar una sola persona puede llegar a borrar todos los archivos, hay que pensar que en esos momentos se trabajaba “en conjunto”.
Esto quiere decir que casi todos los trabajadores tenían acceso directo a los archivos principales porque cada uno estaba trabajando en una pequeña pieza diferente del proyecto al mismo tiempo, pequeñas partes que luego juntas creaban el total de una secuencia. De esta forma se ahorraba tiempo, ya que todos los animadores tenían los mismos privilegios para realizarla.
Oren Jacob relata que ante esta situación se optó por desconectar todo el sistema antes de que se eliminara el proyecto entero. Esa misma tarde, cuando se inicia el sistema de restauración a través de las copias de seguridad, se descubre la segunda parte de esta película de miedo que se vivió en Pixar: el 90% de la película había desaparecido, se había borrado.
¿Por qué? Toy Story 2 ocupaba por aquellas fechas 10 GB (sí, era en el 98) y el equipo técnico, erróneamente, había pensado al comienzo del proyecto que con un backup de 4 GB iba a ser suficiente. Lo que ocurrió fue que a los 4 meses de comenzar el proyecto se había llegado al límite de esos 4 GB, así que a partir de ahí la copia de seguridad guardaba sobre el material del comienzo.
Suponemos que en ese momento hubo una reunión para ver qué se podía hacer y que la mayoría de miembros del equipo corrieron a sus ordenadores para ver si podían rescatar la película, aunque parecía evidente que nadie podría tener una copia completa del film debido al espacio… o casi nadie.
La mamá que salvó a Pixar de un epic fail.
Y es que dentro del equipo de trabajo se encontraba Galyn Susman. Unos meses antes, Susman había dado a luz a un hijo y estaba trabajando desde casa. Pixar le había proporcionado un equipo completo con la película entera para que pudiera trabajar desde allí. No sólo eso, debido a su situación, también había sido la única persona en recibir periódicamente todas las actualizaciones con los cambios realizados durante el tiempo que estuvo trabajando desde casa.
En ese momento no se tenía la certeza de que Susman tuviera todos los archivos borrados, pero como mínimo sería la mayor fuente de la que disponían. Susman contaría que un equipo con ella se dirigió a su casa, tomaron el equipo (envuelto en mantas y atado a un cinturón de seguridad en el asiento trasero del coche). Al llegar a los estudios encendieron el ordenador. Estaba actualizado hasta hace dos semanas, por lo que la pérdida de algún cambio de los últimos días estaría en alguno de los ordenadores personales de los miembros del equipo. Habían rescatado Toy Story 2.
El resto es historia que todos conocemos. Si bien Pixar nunca ha comentado el nombre de la persona que borró los archivos (tampoco si sigue en la empresa), si sabemos quién salvó el proyecto entero. Tory Story 2 se estrenaba en los cines en noviembre de 1999 y recaudó más de 480 millones de dólares en todo el mundo. Desde luego, parece motivo suficiente para que Susman tuviera un “pequeño” incremento en su salario desde entonces.
Fuente: gizmodo